la habitación era pequeña pero cómoda, aunque la cama era dura.

La arquitectura te enamorará

El hotel está en una ubicación privilegiada, justo en la plaza de Silos, permitiéndonos disfrutar del tranquilo sonido de las campanas del monasterio. La atención del personal fue siempre cálida y personalizada, haciéndonos sentir como en casa. Además, el ambiente rústico del lugar crea una atmósfera acogedora y auténtica.

Sin embargo, hay algunas áreas que necesitan mejora. Las habitaciones, aunque con encanto, están algo anticuadas y los detalles como el sonido de las escaleras pueden ser molestos para quienes están en la primera planta. experimentamos un problema con el agua caliente al llegar, lo que hizo las primeras horas un poco incómodas.

A Ubicación perfecta
B Ambiente rústico
C Desayuno fresco

A Habitaciones necesitan mejora
B Ducha deficiente

Todo bien, pero la música a toda pastilla.

Ubicación ideal y la habitación era estupenda con una cama increíble. Además, disfruté del ambiente acogedor con madera y piedra por todas partes. Fue un placer tomar algo en la cafetería.

La cama era tan dura que me desperté sintiendo que había dormido en una tabla.

Las habitaciones son amplias y tienen un encanto rústico que destaca la decoración medieval. La ubicación justo en la plaza permite fácil acceso al monasterio y vistas fantásticas. La limpieza del lugar, aunque no perfecta, pudo haber sido más exhaustiva.

El aire acondicionado es una máquina ruidosa que hay que enchufar, lo que obligó a abrir las ventanas durante el calor, pero eso trajo más ruido de la plaza. Además, hubo problemas con la cuna que no se comunicaron hasta el check-out y el ruido de los motores del hotel se escucha por la noche, lo que puede incomodar si no eres muy tolerant.

Ubicació magnífica, just davant del monestir i amb ambient acollidor. Habitació tranquila amb comoditats i bon servei. Ideal per desconnectar i gaudir de la natura.

La habitación era bastante amplia, pero se sentía un poco oscura y ruidosa a veces. El agua de la ducha salía con buena presión, lo que se agradece, y había suficiente agua caliente siempre. Sin embargo, noté algunos insectos por ahí y creo que debería estar más limpia. Además, la TV era pequeña y un poco antigua. No tenía mucha luz natural. En general, no fue la experiencia más cómoda.

me encantaría regresar

La habitación era bastante acogedora y contaba con amenities como televisión de pantalla plana y baño privado. La presión del agua en la ducha era genial y el personal se portó super bien ayudando con las maletas. El desayuno fue variado y delicioso, incluyendo opciones como tostadas con mermelada. La decoración del hotel tiene un aire medieval muy bonito.

La ubicación es perfecta, justo frente al monasterio donde se pueden escuchar los cantos de los monjes. La decoración en todo el hotel es preciosa y la limpieza es excepcional.

Todo ha sido maravilloso.

La habitación era muy acogedora y contaba con una ducha de hidromasaje que hacía que cada baño fuera un auténtico placer. Además, al estar tan bien situada en la plaza mayor, disfrutamos de unas vistas increíbles del monasterio. El ambiente del hotel es rústico y encantador, haciendo que nuestra estancia fuera realmente especial.

No tienen ascensor, lo que puede ser incómodo para algunos.

Las habitaciones son acogedoras y tienen buen ambiente rústico. El desayuno incluía opciones deliciosas, aunque la cama era algo dura y la limpieza podría mejorar.

mi experiencia en santo domingo de silos fue increíble y el hotel superó mis expectativas durante este descanso por completo. la cama era cómoda y la habitación tenía un ambiente acogedor que me hizo sentir como en casa. el desayuno incluía frutas frescas y delicioso pollo guisado, todo servido con una amabilidad excepcional.

faltó aire acondicionado en la habitación.

El hotel, alojado en un edificio con encanto histórico, está en una ubicación ideal frente al monasterio. Las habitaciones son acogedoras, aunque el ruido nocturno puede ser un inconveniente. Destacar la comida deliciosa y el servicio atento del personal, que contribuyó a una experiencia agradable.